LAS MINI FAT BIKES YA ESTABAN POR TODAS PARTES A FINALES DE LOS 60. COMO LAS “BESTIA”
Lo reconocemos, las mini BIKES no las hemos inventado nosotros ni ninguna de las otras marcas que se encuentran en este nicho. Sólo hemos tomado una divertida y práctica idea, la hemos actualizado y convertido en aún mas práctica y, sobre todo, sostenible. Hagamos un poco de historia y rindamos un homenaje a quienes hace más de 60 años rodaron por caminos que ahora seguimos nosotros sobre todo al visionario Mickey Rupp.
Porque parece ser que todo empezó gracias a Mickey Rupp, que se empeñó en convertir en realidad los sueños e ilusiones de los chavales entre 1968 a 1971. Pensemos que por entonces no había ni Playstations, Nintendos., etc. Por eso construyó todo lo que un chico o chica podría desear en aquellos días: karts, máquinas de nieve, pero el vehículo que despuntó y mantuvo su compañía entre las tops era la minibike. Pequeñas bicicletas/ motos con un motor de no más de 200 cc. En 1962, míster Rupp presentó la Dart Cycle, una mini bicicleta con un motor de 2 1/4 CV, sin suspensión y un freno de tambor trasero. ¡Por 199,50 dólares!... Seguro que lás páginas de las revistas que os ponemos abajo aún la recuerdan los que fueron niños y no tan niños con absoluta claridad.
Aunque a muchos chicos Santa Claus le trajo estas mini bikes, estaban tan bien diseñadas y construidas que podían transportar cómodamente a gente más mayor. Un manillar alto mantenía a los ciclistas del tamaño de un hombre adulto en una cómoda posición vertical, llegaban perfectamente al suelo para mantener el equilibrio al pararse y las luces funcionales frontales y traseras junto al soporte de la matrícula daban buena cuenta de que también estaba pensadas para su uso en las vías públicas. A diferencia de los populares scooters Vespa y Lambretta que requerían aceite mezclado con gasolina, y la capacidad de aprender a usar los cambios, todo lo que se necesitaba para usar un Rupp Roadster legal era gasolina en el depósito y la fuerza para tirar el cable de tracción del motor y arrancarla...
Los campistas las compraron, así como corredores aficionados de circuitos por su capacidad de guardarse en un remolque (para moverse en el paddock imagino). Los estudiantes estuvieron todos de acuerdo con el potente marketing: "Las mini bikes de Rupp son una forma maravillosa de viajar hacia y desde la universidad o el instituto".
Desafortunadamente para Mickey Rupp, la popularidad y sencillez de sus mini bikes fueron la causa de su caída. Multitud de empresas como 500 Industries, Cat, Fox, Mini Doodle y Speedway hicieron sus propias imitaciones/interpretaciones en muy poco tiempo, llenando la sección de anuncios en la parte posterior de las revistas del sector. Igualmente grandes marcas como Sears, Roebuck ofrecieron sus propias mini bicicletas completas…
Para Rupp, todo terminó en 1974, ya que la masiva ola de imitaciones hizo que sus ventas cayesen en picado y además empezaron a llegar bicicletas en contenedores desde Japón (¿Os suena? En este caso de China).
Sin embargo, por un breve momento, las mini bicicletas fueron una sensación. Si no, mira que “celebritys” montaron una: Los Jackson 5, Steve Mcqueen…
Y desde BESTIA BIKES hemos rescatado la idea y seguimos apostando por un vehículo como este, cargado de personalidad, de sentido práctico y de conciencia medioambiental muy mejorado, eso sí manteniendo el espíritu de diversión, independencia y libertad que tenían allá por los años 60 y que no queremos perder nunca.
Fuente: transcripción libre de un fantástico artículo de Craig Fitzgerald en www.bestride.com
